La virtualidad aumentada consiste en aumentar el entorno virtual con estímulos procedentes del mundo físico. Aquí la parte digital ya tiene un peso determinante, pero el mundo físico aún está presente como refuerzo. Podemos encontrar dos planteamientos muy diferentes:
- El mundo físico digitalizado: cuando la imagen procedente del mundo físico es captada por una cámara e incorporada al mundo virtual. Por ejemplo, en el caso de un croma en un estudio de televisión, donde todo el plató es una creación digital, salvo la imagen del presentador, que está siendo captada en el mundo físico e insertada dentro del entorno virtual.
- Las propias cualidades del mundo físico: cuando entran en juego cualidades propias de los objetos físicos para sumarse y mejorar la consistencia de la experiencia que proporciona el entorno virtual, como olores, textura, vibración, dureza o volumetría. Por ejemplo, un entorno de entrenamiento para llevar a cabo tareas manuales bajo presión en ámbitos tan diversos como mantenimiento de instalaciones [1] o cirugía. Las propiedades físicas pueden ser:
- Permanentes o estáticas: una pared, una columna, arena, agua…
- Moduladas mediante actuadores: sistemas hápticos, asientos motorizados, emisores de vapor, rociadores de agua…
Un ejemplo de entorno virtual aumentado con una combinación de propiedades físicas permanentes y otras moduladas es el parque temático The Void [2].